BESITOS que enamoran

Pastero neto, atropellador y fondista, el bueno de Besitos ($ 1.85) recuerda por atributos al pingo Soy Carambolo, también cuidado por Roberto Pellegatta y conducido por “Chupino” Noriega.

Su ajustada victoria de la fecha en el Gran Premio General San Martín-G1 (2400 mts., $ 1.445.000), sobre la gramilla normal de Palermo, significó la cuarta consecutiva de su campaña, sexta en diez salidas, y además le permitió obtener un extra de $ 310.000 por el Campeonato Oro Verde.

Pero el moro del “Pay Ubre” consiguió a la vez uno de esos halagos memorables, porque el carablanca Must go On se le había escapado en los albores del derecho gracias a una genialidad de Ricardinho para filtrarlo entre Go Alone y un puntero, Conwy, que se abría de cansado.

Y ese movimiento, decisivo en muchísimas carreras, no prosperó esta vez sólo por la clase de Besitos, confiado para buscar a su rival, acortarle diferencias en letal arremetida y firmarle cruel boleta de pescuezo al cruzar la raya, casi acompañando en alarde de precisión.

Hubo varios (6) a Quemacoco, con Ligurero a 1½ y Go Alone al anca. Y hubo festejos tupidos alrededor del hijo de Cima de Triomphe (IRE) originario del Haras Don Arcángel.

A los 4 años, el hermanito materno de Idalino (Pleasantly Perfect) conquistó el corazón de la tribuna con su combinación de juventud, talento y madurez.

Pablo F. Gallo
Revista TODO A GANADOR

By: Constanza Pulgar - De Turf Un Poco