Jorge Mayansky Neer                                               

 

Una recompensa que esperó durante 35 años

 

 

Al entrenador Jorge Mayansky Neer, la victoria de Cooptado le permitió obtener su primer Clásico de la Triple Corona y alcanzar la mejor prueba del circuito donde entrena por más de tres décadas: “el turf me dio todo”, simplifica.

 

Nicolás Alcalde

 

Casi no tuvo tiempo el cuidador Jorge Mayansky Neer de celebrar la conquista de Cooptado en el Gran Premio Nacional-G1; algo que anheló durante décadas. Cuando la lógica parecía que la noche del sábado lo podía encontrar con su familia o con los allegados del potrillo ganador en algún restaurant de Puerto Madero, las horas posteriores a semejante felicidad las pasó arriba de un avión.

 

Apenas levantó la copa se tuvo que ir a Ezeiza porque volaba a Estados Unidos, para adquirir algún producto en las tradicionales ventas de Kentucky. Es así la vida profesional de muchos cuidadores, donde casi no tienen tiempo para disfrutar de semejante hazaña, como lo es ser dueño del Derby.

 

Cooptado hizo todo bien en la arena porteña y Mayansky Neer, antes de emprender rumbo al País del Norte, habló con Pura Hípica en la entrega de premios y se encargó de elogiar a su pensionista. “Se lo merecía por sus actuaciones en el proceso selectivo. Cooptado le ganó a buenos  potrillos como Peten Itza y Blood Money. Siempre sueño con ganar la carrera de perdedores, así que esto no tiene precio. También es un merecido premio para Rodrigo Blanco, un gran jockey y amigo”.

 

 

Cooptado y el mejor triunfo para Jorge Mayansky Neer

             (DupratPhoto/PH)

 

 

Mucho se habló en la previa sobre una posible estrategia durante el desarrollo del cotejo con Equal at War, su otro anotado en el Nacional, aunque defensor de diferente stud. Para muchos, la idea de salir a pelear los primeros parciales con el favorito Blood Money resultó efectiva para los intereses del "Ruso" Neer. Se encargó de aclararlo y esto dijo: “No fue una táctica de yunta. No se planteó eso tan así. Equal at War andaba para venir de los de adelante. Cooptado corrió muy bien y fue el vencedor por méritos propios. Los dos caballos habían hecho juntos la pasada en los entrenamientos y andaban bien”.

 

Ya son 35 los años que Mayansky Neer ejerce la profesión de cuidador. Y al estar alojado en Palermo no esconde esa gratificación de alcanzar algo tan esperado. “Es mi primer Clásico dentro de la Triple Corona. Me siento un tipo querido en esta actividad. El turf me dio todo”. Y se fue, pensando quizás también en el próximo martes 19 y en la chance, amplia, de Bajista.

 

Se acercaba la hora del vuelo. Debía seguir en búsqueda de nuevos campeones. Un ejemplo más que claro que en esta actividad casi no hay ni instantes placenteros para disfrutar uno de los mejores momentos que la hípica argentina puede otorgar.

 

Pura Hípica

By Mário Rozano