RENÉ AYUB
“Dont Worry aprendió con el tiempo a ser el que es”
El entrenador cuenta el transito del hijo de Sultry Song hasta la media distancia, después de su egreso de la inferior en 1400 metros y la permanencia jerarquía en la corta durante el primer tramo, con aval de “una sanidad sin un inconveniente”
Sebastián Heredia
Hay cosas que nunca cambian. En tanto, hay otras que, para bien o para mal, se modifican. Del lado positivo, se necesita mucho de inteligencia y madurez. Dont Worry es un ejemplo afirmativo de diversificación. “Un entrenador o un propietario desea tener un potrillo para correr los grandes premios y es muy difícil que ocurra. A mí me tocó una alternativa de esa historia: un caballo que de grande se volvió para cumplir sueños”, expresó el entrenador René Ayub.
El hijo de Sultry Song salió de perdedor el 13 de julio de 2012, sobre 1400 metros. “Después quise hacer lo que cualquier trainer haría: tenderlo para la distancia. Pero no pude. Era muy violento para correr. Entonces, lo trabajamos al revés. Velocidad. Así fue que ganó cinco pruebas jerárquicas entre 1100 y 1300 metros”, explicó el compositor sobre el relato hasta mediados de 2013.
“En ese tiempo ya podía hacer lo que quería yo, porque Dont Worry estaba más maduro. Se fue amansando, entendía la diferencia de los trabajos. Fue natural. Aprendió con el tiempo a ser el que es”, recalcó hasta este presente. Entre ambos paralelos, una definición acabada del nieto materno de Lucky Roberto: “Superó todo lo que se le pidió sin ningún sacrificio. Le gusta hacer lo que hace. Es difícil tener eso en un caballo de carrera”, afirmó con orgullo.
René Ayub, el responsable de entender los momentos de Dont Worry
(Diego Trubba)
En la víspera de la justa continental, dos puntos a favor. Por un lado, “la inteligencia del Rodrigo Blanco y el potencial de Dont Worry”. “Su versatilidad es un punto fuerte. Es difícil darle las instrucciones a un jockey, porque hay imponderables en el desarrollo y a veces no es bueno que se agarre a reglas firmes. A mí me gusta en el medio del lote, pero ambos (jockey y caballo) pueden cambiar el plan”, agregó por el trámite.
La segunda arista subrayada por Ayub es la sanidad. “Siempre lo hablo con todo el Mundo y no me cansaré de decirlo. Nunca Dont Worry me dejó un grano sin comer, sufrió tos, sobrecañas o tuvo fiebre, ni siquiera un gesto de dolor. Es la perfección de salud”, profundizó, al tiempo que confirmó que “hará algo el próximo martes y la partida final el siguiente”.
Dont Worry está en carrera. “Está todo bien y no creo que eso vaya a cambiar”, finalizó Ayub sobre un caballo que sí cambió, con lo que se volvió el ganador de 14 rounds (una decena por encima del llano) y fue protagonista de cuánta elite entre la milla (donde ganó dos G1) y dos kilómetros hubo en el último par de años. Cambiar para bien. Esa es la cuestión.
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By De Turfe Um Pouco
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