JULIO CÉSAR MÉNDEZ

“Ojalá algún stud argentino se fije en mí para volver”

El jockey uruguayo, que ya tuvo un exitoso paso por la hípica local, acaba de ganar la estadística en su país y este martes irá por la revancha y su primer Ramírez con Hielo, vencedor de la edición 2014, cuya monta le “quitaron” el año pasado. En medio de su gran presente, confió a Pura Hípica que sueña con pegar la vuelta.

Fabricio Abatte

Extraña desde el primer día en que se volvió a su tierra. La hípica argentina lo marcó a fuego, además de jerarquizar su carrera. Por más que ganó en otros aspectos al regresar a Uruguay, Julio César Méndez nunca dejó de añorar aquellos tiempos felices de este lado del Río de La Plata. Incluso en un auspicioso momento personal y profesional, no oculta, a la distancia, su deseo de retornar a un turf en el que dejó gratos recuerdos como jinete y ser humano. El jockey que acaba de ganar la estadística charrúa y el martes buscará su propia revancha en el Ramírez con Hielo, héroe de la edición 2014 cuya monta le quitaron en esa ocasión, busca cómplices para pegar la vuelta. Por ello envía un mensaje a través de Pura Hípica: “ojalá hubiera algún interesado en mí en la Argentina”. Quien quiera oir…

“Ganar la estadística siempre abre puertas y ojalá hubiera algún interesado en mí en allá. Extraño al mejor turf de Sudámerica, que me dio un nombre y al que siempre le estaré agradecido. La competencia está ahí, los mejores jockeys están ahí…”, blanquea su anhelo el piloto que se dio el lujo de ganar dos Pellegrini, con Storm Mayor y Latency.

Claro que para cumplir el sueño deberían darse las condiciones; a los 43 años y con una familia detrás, el ex jinete de La Biznaga no se arriesgaría a la aventura como hizo la primera vez, si bien le salió genial. “El tema es que no es fácil volver así nomás, empezar otra vez de cero, conseguir montas… Las ganas siempre están, quiero seguir logrando cosas importantes si bien hoy me encuentro cómodo en Maroñas, en mi país. Insisto, ya pagué mi derecho de mi piso, no puedo irme con el bolsito como la primera vez; no es que pretenda grandes cosas pero todo sería más fácil si tuviera un stud que me apoyara”, asegura coherente, sin descartar el retorno pero aclarando que más allá de su fuerte deseo no será a cualquier precio.

Méndez, en sus tiempos en Argentina; pidió a los Reyes dos regalos: 

ganar el Ramírez y volver al país. (Dupratphoto/PH)

LA ESTADÍSTICA

Terminó el 2014 de la mejor manera Julio César, con un gran objetivo cumplido. “Gané la estadística con 74 victorias, un alto promedio porque acá se corre los fines de semana. Y eso que no había empezado bien el año, en el primer semestre no me fue muy bien, venía de una dura caída a finales de 2013 y había desconfianza en torno a mi estado. Empecé a ganar clásicos, a cruzar y cruzar y por suerte se me dio”, comenta quien también defendió las sedas de La Providencia en nuestro país.

En realidad, siempre fue alto el nivel de Méndez en esta nueva etapa en Uruguay, aunque una violenta rodada hizo postergar la conquista anual. “Vine a mitad del 2012 y gané muchas carreras y la estadística clásica… En 2013 venía adelante cortado en la estadística y me caí, sufrí un accidente muy duro en el que me rompí siete costillas y estuve mucho tiempo parado. Hice todo para volver en el Ramírez, la carrera grande que me falta ganar”, explica el jockey que en la Argentina destacaba más en los clásicos que en las comunes.

LA REVANCHA

Si el 6 de enero Méndez corta su sequía en el Ramírez con Hielo, todos hablarán de “revancha” y “linda historia”. Julio César cuenta los primeros capítulos mientras se prepara para “escribirle” un final feliz… “El año anterior me recuperé en 42 días cuando los médicos me daban para cinco ó seis meses. Todo por mis ganas de correr esta carrera que se me viene negando y con Hielo, el caballo al que montaba y tenía chances. Reaparecí el día anterior y gané una más. Pero me lo quitaron porque recién volvía de la lesión; por suerte para ellos ganaron, para mí fue otra rodada…”, recuerda la decepción que vivió.

“No hay que mal que por bien no venga porque gracias a eso agarré a un caballo con el que he ganado varios clásicos este año”, resalta lo positivo de una circunstancia amarga.

Méndez asocia la situación con otra que vivió en la Argentina en torno al Pellegrini. “Ahora tengo la revancha y me trae el recuerdo de Storm Mayor, al que no lo pude correr en el primer Pellegrini que ganó porque tenía compromisos pero al año siguiente sí lo monté y ganamos esa carrera gracias a que Falero no lo podía correr, pues tenía una monta del Araras. Ojalá que cierre todo…”, se ilusiona con la coincidencia, esperando que se repita el desenlace.

“Ya pasó un año y hay varios caballos con chances, como Fletcher, el potrillo que el año pasado escoltó a Sir Fever, el que se destacó. Entre los adultos, el mío es el que ha tenido el mejor año y está bien, muy sano”, advierte y el ruidito del mate se siente del otro lado del teléfono.

Ese teléfono que espera otro llamado de Argentina, más precisamente de algún stud para cumplir el sueño del regreso.

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By De Turfe Um Pouco