AMERICAN TATTOO cerró la hazaña de "Pelle"

 

A la usanza de su hermano entero Mystery Train. Sin dar ni pedir cuartel. Con el peso de los boletos totalitarios y la segurola de un jockey, Gustavo Calvente, que no admitía contra alguna. Así, a lo bueno, American Tattoo ($ 2.05) se consagró de un viaje en el Gran Premio Polla de Potrillos-G1 (1600 mts., $ 2.380.000), primer pase de la Cuádruple Corona, y le brindó un tremendo doblete de gemelas a su cuidador.

As del Paraíso y Power Up lo trataron de hostigar durante la mitad inicial del recorrido, el Angiolo de Jony Ramallo se aguantó hasta bien entrada la recta, y por los 400 tomó su posta con serias pretensiones el zaino Imagen de Roma, colocándose en el arranque al anca del vanguardista e ilusionando a sus adeptos. Sin embargo, al ser llamado por su piloto, American Tattoo se desprendió con un cambio de marcha determinante, abriendo 4 cuerpos de luz en el furlong decisivo con el remate distintivo de los caballos diferentes.

A 2½ de Imagen de Roma, Tremendo Tordo relegó por VM y ½ a Dar la Paz y Raven Master, con Endormoon en el 6º casillero por encima de As del Paraíso. El resto hubiese ido al Muro de los Lamentos de Carlos Nalé.

Originario del Haras La Pasión y representante de la ecurie “Juan Antonio”, el vástago de Not for Sale y American Whisper (USA), por Quiet American (USA), registra una breve trayectoria de dos triunfos en tres incursiones, con mucha tela todavía por cortar. Porque saltó de su masacre condicional al máximo estamento y acaparó en la parada de septiembre mayores elogios que los acumulados en ochos meses por sus laderos de generación.

Párrafo aparte para Roberto Pellegatta, suspendido por 2 años a raíz de un presunto suministro de cocaína al SPC Montsant, en otro caso para anotar en los cuadernos del absurdo a la par de los inherentes al correntino José Cristóbal Blanco, “Pili” Bortulé y la andanada de trainers platenses volteados por idéntica sustancia un tiempito atrás. Hay que pecar de ingenuos para comerse una opereta semejante o creer capaces de tamaña imprudencia a Señores Cuidadores; y a la vez, empezar a validar aquellos comentarios de advertencia acerca de manos negras ajenas al Turf pero dispuestas a ensuciarlo a cualquier costo. Las mías, las de laburante, las pongo en el fuego por “Pelle”. Sin pensarlo ni dudar.

Pablo F. Gallo
Revista TODO A GANADOR

By: Constanza Pulgar - De Turf Un Poco